miércoles, 26 de octubre de 2011

EL CAMBIO ERES TU

Defiendo como el primero el carácter “genial” del español.
            Improvisador y ocurrente es capaz de arreglar cualquier cosa con un trozo de cinta aislante y una cuerda.
            Si de estudiar se trata, nada como arremangarse bajo el flexo la noche antes del examen.
            Nos sobran todos los plazos porque nos basta con el último día de cada uno de ellos, todos apelotonados en la ventanilla real o virtual de turno.
            En todos los trabajos “se fuma” se decía antes para justificar la remolonería laboral en la certeza de que, al final, el encargo que fuere más tarde o más temprano sería entregado.
            Lo que te avisan para hoy estará mañana…. o pasado.
            Como nos conocemos el percal, ya sabemos que antes o después, mejor o peor, al final todo se repara, se supera, se presenta y se entrega.
            Pero el mundo no funciona así y, con el evidente grado de competitividad existente nosotros tampoco podemos seguir de esta guisa. Una cosa es la proverbial “genialidad” hispana puesta de manifiesto a lo largo de la historia por insignes personajes, y en el día a día por todos y cada uno de nosotros seres anónimos, y otra bien distinta la “chapuza” nacional en la que estamos metidos de hoz y coz.
            La falta de profesionalidad nos desborda. Es difícil encontrar a cada uno en su sitio haciendo lo que debe y responsabilizándose de su trabajo bien hecho.
            Más al contrario, la responsabilidad brilla por su ausencia y todo el mundo juega a tirar “balones fuera”. Nadie quiere hacerse cargo de ningún problema para buscar su solución y sobran voluntarios a la hora de plantear excusas para eximirse del asunto.
            Es obvio que la crisis que nos atenaza tiene profundas raíces y de muy diversa índole. En mi opinión, una de sus  ramificaciones no menor se encuentra en nosotros mismos. En nuestra falta de responsabilidad para desempeñar adecuadamente nuestras obligaciones ya sean profesionales, laborales, estudiantiles, sociales o familiares.
            Todo lo que hacemos – y lo que no hacemos – es importante y hay que llevarlo a efecto con rigor, sentido común, seriedad, respeto y aprecio con atención y deferencia a lo que de ella afecta a los demás.
            Todos somos necesarios para el progreso de nuestra sociedad. Tan importante es el que desempeña el escalón más sencillo como el Presidente del Gobierno. Todos aportamos al bien común y de todos se espera un trabajo bien hecho.
            En definitiva, considero que el verdadero comienzo del cambio está en todos y cada uno de nosotros mismos. Si decidimos individualmente cambiar nos estaremos ganando colectivamente el progreso y el futuro y seremos de verdad y sin duda “geniales”.

domingo, 23 de octubre de 2011

VIDAS VIRTUALES

Salvo muy honrosas excepciones, andamos todos un poco desubicados “strictu sensu”. Estamos aquí y allá a la vez, que es tanto como sugerir que no estamos, “de verdad”, en ninguna parte.
            En muy pocos años “nuestro pequeño mundo” se ha hecho inmenso hasta el extremo de perder la percepción del espacio. Vemos y hablamos en tiempo real con personas a las que no conocemos y que se encuentran en el otro extremo del orbe.
En unas semanas entablamos “relación virtual” con más congéneres que nuestros abuelos en toda una vida.
Nos resulta más fácil volcar nuestra opinión, sentimientos y percepciones sobre un teclado y ante una pantalla que cara a cara con otra persona.
Consumimos con fruición ideas en 140 caracteres y hay quienes sólo viven para colgar fotos en su muro.
Es casi fuerza irresistible sentarse ante el ordenador y no entrar en Twitter o Facebook.
A muchos se les hace complicado atender la tele sin un tablet en la mano para no perderse el “bullicio” de las redes. Y más curioso aún: muchos de los tertulianos que protagonizan las noches televisivas están twiteando de forma simultánea con quienes les siguen desde sus casas quienes, a su vez, también hacen lo mismo….
Confieso mi interés por las redes sociales. No se puede dar la espalda a esta novísima forma de comunicación,  pero he de decir que las más de las veces asisto de “voyeur”, en silencio.
Me imagino estar en una plaza pública, rodeada de cientos de miles de personas que se interpelan, se cuentan, dan noticias, publican chismorreos, ligan, exponen sus ideas, opinan, e incluso sueltan exabruptos … supongo que como ocurriera en el Ágora ateniense, o el Foro de romano pero miles de años después.
Pero no es lo mismo.
El mensaje trasciende al mensajero, tan compulsivo como irreflexivo. Importa “lo que se dice”, no “quién lo dice” de tal forma que la opinión más indocumentada y frívola está en pie de igualdad con la de un experto en el tema.
Consumimos noticias con la misma velocidad que damos cuenta de una bolsa de pipas. Las dos nos entretienen, tanto da un terremoto con miles de muertos que el derrocamiento de un dictador, el abandono de las armas de unos terroristas o el podio de unos deportistas…
Todo es absolutamente superficial. El “Carpe Diem” llevado a su máxima expresión en el menor lapso de tiempo posible.
“Carpe diem, quam minimum credula postero” o aprovecha el día de hoy, y no pongas de ninguna manera tu fe ni tu esperanza en el día de mañana.
Craso error: siempre hay que mantener la fe y la esperanza en el día de mañana a menos que seamos los titulares de una vida “basura” de usar, consumir y tirar.

martes, 18 de octubre de 2011

DIOS NO ES UNA METÁFORA

            Ayer, entre col y col, y como dejando caer la pregunta con el temor de obtener una respuesta que no quería oír, Estrella me preguntó: “Oye, ¿es verdad que Dios es una metáfora?”.
            Dudo que, por su edad, conozca con exactitud el recurso literario de la “metáfora” así que atribuyo su calificativo a esas antenas tan largas que tienen todos los niños para captar la información allende su campo visual.
            Aunque tan vez pueda deberse, cómo no, al intento de un adulto de “explicarle” quién es Dios.
            Sea cual fuere la razón, lo cierto es que una pregunta tan inocente me sugiere cómo es en realidad nuestra sociedad occidental y me proporciona una pista de porqué es tan decadente.
            Somos tan relativistas que abrazamos la filosofía de los sofistas retornando al siglo V: “El hombre es la medida de todas las cosas”.
            No hay verdades absolutas, todo depende de la percepción que cada uno tenga al respecto.
            Y como Dios eterno e infinito no se somete a nuestras insignificantes medidas, pues lo convertimos en una metáfora y asunto arreglado.
            Nos pasamos la vida haciendo actos de fe ridículos, creemos y confiamos necesariamente cada día en el buen criterio de miles de personas a quienes no conocemos y con las que mantenemos relaciones de interdependencia, desde el panadero, hasta quienes dirigen la central nuclear que nos proporciona la electricidad, pasando por el conductor del autobús, el médico que nos atiende, el ingeniero que ha proyectado el viaducto por el que circulamos… No les conocemos. Vemos su obra. Confiamos en que esté bien hecha.
            Y ¡qué decir de la tecnología!. ¿Cuántos de los que viajan en avión racionalizan cómo funciona, saben a qué leyes físicas y químicas tienen que agradecer su vuelo? ¿Confían en el piloto?.¿Qué sabemos de los ordenadores?, ¿quién es capaz de racionalizar internet?...
            Tenemos fe, hacemos permanentes actos de fe con seres de “nuestra medida” pero nuestra mente pacata nos impide abrir los ojos a mayores tamaños. Incapaces de mirar alrededor y admitir que la grandiosidad de nuestro planeta, escenario de nuestras vidas, la precisión de las leyes físicas, la indescriptible naturaleza, que la magnificencia del Universo…  no es de “nuestra medida”.

            Me bastó decirle a Estrella que pensara en las montañas y en los mares, llenos de vida, en el sol y la luna, en Saturno con su anillo y el enorme Júpiter, las galaxias… ¡en ella misma!. Y que sacara sus propias conclusiones. Sonrió y me miró con ojos limpios y tranquilos ajenos a la incertidumbre que mostró en su pregunta.

            Sinceramente concluyo que no vamos bien por este camino cuando, lejos de reconocer nuestra insignificancia, somos tan pobres de espíritu que preferimos convertir a Dios…. en una metáfora.

domingo, 16 de octubre de 2011

SAN SEBASTIAN O CUANDO LA CORDURA SE PIERDE

                Indignado, -da adj. Que está muy enfadado o disgustado por algo que considera injusto, ofensivo o perjudicial.
            Informa la página web de RTVE que el próximo lunes “Una conferencia internacional promovida por seis entidades que trabajan en el ámbito de los derechos humanos y la resolución de conflictos reflexionará en San Sebastián en torno al proceso de paz y normalización del País Vasco, con el objetivo de impulsar "un avance significativo" hacia el fin de la violencia” (sic).
            Leo en El Mundo la lista de “asistentes”.  Respecto de los extranjeros que van a estar en esta “Conferencia”, francamente no recuerdo haber visto a ninguno por la tele en los funerales de los casi mil asesinados de ETA.
Me resulta especialmente llamativa la asistencia Kofi- Annan que irá por primera vez a San Sebastián. Tuvo ocasión de hacerlo como Secretario General de la ONU, en las manifestaciones previas al asesinato de Miguel Ángel Blanco y a su posterior entierro, pero no lo hizo.
Por “España” acudirán al encuentro “internacional”,  representantes políticos del PSE –EE , que es el PSOE con chapela y de UGT y CCOO. Unos y otros, partido nacional y sindicatos que cobran de los presupuestos del Estado.
 Ni que decir tiene que en la fila 0, y siguiendo la terminología de Arzalluz, estarán  los que “mueven el árbol” y los que “cogen las nueces” – en sus distintas versiones.
… Ahora resulta que al asesinato, el secuestro y la extorsión hay que llamarlo “conflicto”.
… Ahora resulta que al terrorismo hay que llamarlo guerra, porque dicen que hay que firmar la paz.
… Ahora resulta que son los huérfanos, las viudas, los padres y los hermanos de los asesinados; los mutilados, los secuestrados, los extorsionados, los al parecer más de 200.000 vascos en el “exilio” que han tenido que salir huyendo para poder vivir, en definitiva, los que ni están ni pueden estar en esta ignominia los que han de ser objeto de “normalización” para que sus verdugos impulsen un avance significativo para el fin de la violencia.
Pocos hechos se me antojan tan injustos desde la perspectiva moral, tan ofensivos a la dignidad humana y tan perjudiciales para la convivencia social en el marco de la Justicia y de la Paz que esta Conferencia.
Que los “indignados profesionales” estén a su bola en Sol con su movida tope guay y nada tengan que decir a esto expresa mucho también de su actitud colectiva ante la vida.
Verdaderamente el grado de amoralidad, de indignidad y de injusticia que existe en la sociedad nos está devorando de tal forma que estamos perdiendo la cordura y con ella el futuro.

miércoles, 12 de octubre de 2011

LOS POLITICOS Y "SU" REALIDAD

            Mientras el 20 N se acerca inexorablemente, los partidos se afanan en afrontar la labor más peliaguda, delicada y peligrosa de toda la legislatura.
            ¿Analizar la situación en los distintos ámbitos sectoriales de gobierno para elaborar su programa electoral?. No.
            ¿Desarrollar las líneas maestras para ejecutar nada tomar posesión y que se note un cambio de rumbo?. No
            ¿Elaborar la lista de “recortes” en gastos prescindibles para poder hacer frente al pago de los que son obligatorios? No
            ¿Confeccionando las “rutas electorales” para contactar con los electores y difundir el mensaje?. Tampoco.

            Entonces ¿qué coño (con perdón) están haciendo?
            ¡Ah!, lo más importante: cuatro contados que son los mismos de siempre en cada sede provincial de cada uno de los partidos que concurren a las elecciones están midiendo, elucubrando, castigando, premiando, compensando…..

            Midiendo… fuerzas. Los unos para ver si siguen en el cargo, y los otros para ver si pueden quitarlos para dejar un “hueco” y ponerse ellos o su cuñado.

            Elucubrando…. Posibilidades y carambolas.  A ver si me cuelo de 5º porque aunque saquemos 3 como al 2º le van a nombrar Comisario Regio y al 3º Embajador en las Chimbambas,  la lista sube y entro en el Congreso.

            Castigando…. a quienes no han dicho “Si Bwana” las suficientes veces en los últimos 4 años. “Yo a Manolo me lo cargo, ¿pues no quiso presentar una lista alternativa a la oficial en el último Congreso del partido?”.

            Premiando…. “Pepi, que es una chica muy maja y que hace fenómeno las fotocopias no salió elegida Alcaldesa de su pueblo,  con lo bien que lo hizo… y encima, es mujer que viene bien a la candidatura”.

            Compensando…. Marta Domínguez.

            ¡Y luego decimos que los políticos viven al margen de la realidad!.


lunes, 10 de octubre de 2011

Nuestro Gran Timonel

            Nuestro alegre Gran Timonel -  aquél que afirmó públicamente que Gobernar era más fácil que conducir un camión, o que “cualquiera” (véase la muestra) puede llegar a ser presidente de Gobierno – está a punto de llegar a puerto a orillas del Bernesga.
Con creciente perplejidad por parte del respetable nos ha estado guiando con la mirada permanentemente puesta en otra parte. Como si su mente bailara al son de una eterna “yenka”. Unas veces con la atención hacia atrás en un viaje al futuro con vistas al pasado, otras dejándose llevar por sus fantasías internas y las más de las ocasiones perseguido por sus fantasmas personales. Responsable de una travesía incierta, imprevisible y desoladora.
Con gran habilidad ha ido tirando por la borda las mentes más preclaras, independientes y sensatas de su partido, y en justa pero equivocada correspondencia ha subido al puente a lo más granado de la indigencia intelectual. A medida que nuestro alegre Gran Timonel ha ido surcando las procelosas aguas de la realidad perpetrando en el BOE su cuaderno de bitácora, las voces han ido elevando el tono: “¡Pero si está desnudo!”.
Y así nos deja después de casi 8 años de espejismos ¡hechos unos zorros!, y no precisamente en alusión a la astucia del animal.
            Pero, como todo, esta situación también tiene su lado positivo si somos capaces de aprender la lección. A buen seguro que el primero en tomar nota va a ser su propio partido.

"Ser o no ser..."

La mayor parte de las personas mueren después de haber vivido, pero también hay muchos otros que, simplemente, están y luego de unos años se van.
Vivir significa "ser" y para "ser" hay que implicarse en lo que nos rodea. Implicarse en la familia, implicarse en el trabajo, implicarse con los amigos, con unas ideas, con una fe, con una forma de entender la vida...Tomar partido por lo que uno cree, por lo que piensa, por lo que siente... y asumir el riesgo de vivir.
Por eso, porque la vida es un camino de decisiones es fundamental adoptarlas con espíritu crítico, actitud destilada de la formación y la información.
Aquí radica la diferencia entre quien "es" y quien nada más "está". Mientras que a los primeros les/nos preocupa saber, aprender, conocer, contrastar, profundizar, averiguar, incidir, analizar.... a los segundos, los que solo "están" les basta con encender la tele para adoctrinarse en lo que tienen que pensar y luego distraerse "belenestebaneando" un rato.
Lo malo es que el 20-N todos votamos igual.
Indudablemente "ser" es apasionante mientras que "estar" debe ser un bodrio de cuidado pero, como dice Mafalda: "los buenos empezamos a cansarnos".

sábado, 8 de octubre de 2011

Reflexión sobre la cadena perpetua revisable

Una de las funciones de la pena es, sin duda alguna, defender a la sociedad frente a los delincuentes. Hay muchas clases de delitos, muchas circunstancias que llevan a su comisión, muchas tipologías de delincuentes... y un referente común a todo ello: los ciudadanos, para no tomarnos la justicia por nuestra mano, hemos delegado la misión de "impartir justicia" a un poder del Estado, el PODER JUDICIAL.
Por muchas razones que no vienen al caso pero convendría revisar, los ciudadanos nos creemos indefensos, desprotegidos, las víctimas parecen tener menos derechos que sus verdugos, no sentimos que realmente se hace justicia y sobre todo afloran casos absolutamente sangrantes y deleznables que se saldan con unos pocos años de carcel y una gran burla.
Hay personas que, indudablemente, son auténticos depredadores, seres peligrosos para la sociedad, ejemplos del mal que ocasionan graves daños a quien se cruza en sus vidas y que deben ser apartados de nosotros.
Dicen algunos políticos que en caliente no se puede legislar, pero en  frío tampoco lo hacen.
El PP propone la CADENA PERPETUA REVISABLE.  Pues bienvenida sea. En un Estado de Derecho, con plenas garantías de un juicio justo, no hay porqué temer que exista este tipo de condena aparejada a determinados delitos muy graves.
Yo estoy de acuerdo y siento que, por fin, el Estado ha decidido protegernos.

Un minuto, por favor.

Vivimos tan deprisa que consumimos nuestros días a la carrera, como si intentáramos llegar los primeros. El problema es que, ¿sabemos realmente dónde vamos?. A fuerza de tanto correr nos estamos olvidando de vivir y hasta de pensar. ¡Es más rápido que piensen otros!. Hay que saborear cada día, cada hora, cada segundo... Analizar lo que nos rodea. Someterlo a nuestra crítica ... y sacar conclusiones. Tomar las riendas de nuestra existencia, ser nosotros mismos, seres únicos e irrepetibles. Moldear el aire que nos rodea, hacernos un hueco en nuestro pequeño mundo, aportar nuestros talentos para que un día, cuando ya no estemos, podamos ser recordados como personas a las que hubiera merecido la pena conocer.
Esta humilde tribuna cibernética sólo pretende hacer pensar, a ser posible con humor, para contribuir a despertar esta sociedad tan muelle, cómoda y tele(visión)dirigida en que vivimos.